Quizás pienses que invertir solo es cosa de ricos o para esos brokers que aparecen en las películas de Wall Street con tirantes, pelo engominado pegados, rodeados de un mar de pantallas de ordenador y dando gritos por teléfono de “compra” o “vende” … ¡Olvídate! Quizás el error venga porque la palabra invertir parece estar alejada de la palabra ahorrar, cuando, la una sin la otra, no tienen sentido ninguno. Para ahorrar de forma adecuada, necesariamente, tienes que invertir.
¿QUÉ ME HACE FALTA PARA EMPEZAR A INVERTIR?
Lo primero de todo, planifica.
Toda decisión de inversión debe partir del estudio previo de tus circunstancias personales y de hacer una correcta asignación de tus recursos financieros a cada horizonte temporal (corto, medio y el largo plazo). Esto es clave para la consecución de tus metas de una manera tranquila y segura… sin sobresaltos. Dicho de otro modo, solo invertirás el dinero que no necesitas en tu día a día, los ahorros que no vas a usar en el corto plazo, y en la cantidad con la que te sientas cómodo, sobre todo si son tus primeros pasos.
¿DÓNDE INVIERTO?
Para contestar a esta cuestión, antes tenemos que pensar en el problema que supone ahorrar dinero y no invertirlo en nada. Si acumulamos dinero y no conseguimos ningún rendimiento con él (eso significa no invertirlo), la inflación, la subida de precios, que, con el tiempo, sufren los bienes y servicios que cotidianamente consumimos, hará que nosotros ahorros pierdan capacidad adquisitiva… cada vez compraremos menos con nuestro dinero, y será mayor cuanto más tiempo este guardado el dinero. Por lo tanto, invertimos nuestros ahorros por la necesidad de defendernos de la inflación como objetivo principal.
Ahora sí, una vez contestado el por qué es necesario invertir nuestro ahorro, vamos a ver dónde lo invertimos: La Bolsa.
¿Te has parado a pensar que todo lo que consumes genera beneficios a quien lo produce? Las empresas, ya sean de productos o servicios, tiene su razón de ser en la obtención de beneficios. Beneficios que reparten entres sus socios/accionistas que son las personas que han depositado sus ahorros en ellas con intención de revalorizarlo. Por lo tanto, la manera mas natural de invertir tu ahorro es en la propia economía real, en las empresas que te rodean… invertir en bolsa.
La bolsa es el activo que mejor retorno ha otorgado. Pero ojo, en el largo plazo. Si tu idea es acercarte al mundo de la inversión en bolsa, queriendo multiplicar tu dinero en pocos días, lo más probable es que lo pierdas y acabes pensando que la bolsa es solo para ricos y que se necesita mucho capital. Justo los mitos que tratamos de evitar. No trates de ganar dinero rápidamente, ni uses ese dinero que tanto te ha costado ganar como si se tratara de un casino.
La bolsa es un buen activo donde empezar a ganar dinero invirtiendo poco y a largo plazo. Otros activos como el inmobiliario se necesita una suma importante de dinero, pero la bolsa es accesible tanto para el gran inversor como para el minorista.
Para invertir en bolsa con poco dinero puedes hacerlo de dos formas:
- Directamente tú mismo adquiriendo acciones. Caso no recomendable si careces de los conocimientos financieros y del tiempo para analizar y seguir las empresas. Además, si tu idea es invertir 50€ al mes y el broker te va a cobrar 5€ por operación, estás pagando un 10% en comisiones.
- A través de expertos, profesionalizado la gestión. Los Fondos de inversión, son empresas que se dedican exclusivamente a invertir en otras empresas y lo hacer mediante su equipo de expertos, personas que están continuamente estudiando el mercado y la situación de las empresas para tomar las mejores decisiones, por lo que no necesitaras ni grandes conocimientos, ni tanto tiempo. Lo importante es seleccionar un buen fondo de inversión y con comisiones razonables.
Además, de la profesionalización, los fondos de inversión gozan de otras ventajas muy importantes:
- Fiscalidad. Los fondos de inversión son mejores que las acciones porque te permite posponer el pago por plusvalías. Para entendernos, si quieres vender una acción para comprar otra, te va a tocar pagar impuestos. En cambio, si quieres cambiar un fondo por otro mejor o por el motivo que sea, lo puedes traspasar y evitar pagar impuestos.
- Diversificación. Los fondos de inversión te permiten una distribución de tu ahorro en múltiples, sectores, zonas geográficas, tipos de activo, … todo a través de la misma herramienta. Una buena diversificación es la base de la seguridad de tu ahorro, ya sabes, no pongas todos los huevos en la misma cesta
- Accesibilidad. Te permiten invertir, con pequeñas cantidades, en activos como el inmobiliario, materias primas, divisas, infraestructuras … que de otro modo y solo por tu cuenta, necesitarías de un gran capital.
- Adaptabilidad. En función de tu perfil de riesgo, puedes acceder a fondos que tengan tanto renta variable como renta fija.
Ahora ya sabes que para conservar de forma adecuada tu ahorro, es necesario invertirlo, y que no necesariamente tienes que usar tirantes y estar todo el día con un teléfono en la mano dando órdenes de compra y venta. Solo hace falta una buena planificación (coherente con tu situación personal y tu estilo de vida) y la gestión profesional de un equipo de expertos, si no tienes los conocimientos necesarios para operar directamente en bolsa.
Invirtiendo poco a poco y con constancia puedes hacer crecer tu patrimonio.